Milonga para mi pueblo
Por Carlos Marcos Corti.
Desfile en Maipú en el año 1910, para el Centenario de la Revolución de Mayo. |
Yo quiero cantar, amigos,
milonga para mi pueblo;
milonga de mi terruño
donde voy llegando a viejo.
Yo quiero cantar, amigos,
milonga para mi pueblo
que fue naciendo de a poco
del amor de los que fueron.
Milonga de las indiadas
que en estos campos corrieron,
con su botín de cautivas
y con su collar de muertos.
Aquí anduvo José Hernández
llevando a su Martín Fierro
prendido en su corazón
como un abrojo estrellero.
Aquí anduvo de mocito
trabajando de resero
por este pago del sur,
cantando estrellas y sueños.
Yo quiero cantar, amigos,
milonga para mi pueblo,
mi pueblo que un día
fue solo un poco de cielo
Cubriendo un poco de pampa
como si fuera un pañuelo,
y que creció como un niño
al amor de los abuelos.
Con su gran poeta muerto:
milonga para Maipú
don Leopoldo Marechal
que nos llevó en su recuerdo,
Y nos hizo conocer
en el universo entero,
nombrando siempre a Maipú
en sus libros y en sus sueños.
Yo quiero cantar, amigos,
milonga para mi pueblo:
el campanario, la plaza,
el milico, el farmacéutico,
un cielo azul de juguete,
sus palomas, los chicuelos
correteando por la calle
cuando salen del colegio,
sus borrachos inocentes
y sus tipos pintorescos,
y un perfume de nostalgia
que se nos queda en el pecho.
Milonga para Maipú,
donde mis padres murieron,
donde nacieron mis hijos,
donde yo ya me voy yendo...
Carlos Marcos Corti. Maipú: Setiembre de 1978.